lunes, 8 de julio de 2013

Ronquera o Afonía



REMEDIOS CASEROS PARA LA RONQUERA

Las cuerdas vocales son dos capas de tejido fibroso que se hallan en la laringe y están encargadas de producir la voz.
La laringe en ocasiones se inflama, provocando la condición que conocemos como ronquera o afonía (puede durar días; también volverse una condición crónica).
La persona que sufre de laringitis debe guardar reposo, manteniendo la laringe húmeda.
REMEDIOS CASEROS PARA CURARSE DE LA RONQUERA
- Evite la fiebre.
- Son efectivos todos los elementos suavizantes y emolientes, especialmente el anís, el eucalipto, la salvia, el tomillo, la amapola.
- Haga gargarismos en un cocimiento preparado con 1 cucharada de cada uno de los siguientes elementos: hojas de repollo, espliego, malva y violeta en 1 litro de agua.
- Tómese diariamente un cocimiento preparado con anís y 1 cucharada de miel de abejas.
- El limón es un excelente refrescante y desinfectante de todas las mucosas. Haga gárgaras mezclando partes iguales de zumo de limón y agua tibia.
- Tome la cucharada de zumo de limón mezclado con una cucharada de miel de abejas (todas las mañanas).
- También puede preparar un cocimiento con la cascara de varios limones y endulzarlo con una cucharada de miel de abejas. Tome 1 taza al acostarse.

Incontinencia Urinaria



Recetas para combatir la incontinencia urinaria

1.- Hervir dos cucharadas de hinojo en un vaso de agua. Dejar enfriar y beber esta infusión todos los días.
2.- Hacer baños de asiento con agua tibia. Contraer los músculos genitales y contar hasta cinco. Reiterar varias veces.
3.- Orinar entre cortado. Es decir, orinar y parar. La intención de este ejercicio es fortalecer el músculo de la vejiga. 
4.- Mezclar cinco gotas de aceite de almendras con cinco gotas de esencia de tomillo. Dar un suave masaje en la zona de la espalda a la altura de los riñones y en el vientre durante cinco minutos. Reiterar tres veces al día.
5.- Hervir 30 gramos de algarroba por litro de agua. Cocer durante veinte minutos. Colar y beber un vaso diario.
6.- En caso de que la incontinencia sea nerviosa, beber una infusión al día de pasiflora o Valeriana.
7.- En una taza de agua hirviendo, colocar una cucharada de flor de manzanilla. Beber una taza tres veces al día. Repetir durante siete días.
8.- Masticar una rama de canela antes de irse a dormir.
9.- Beber una infusión hecha a base de corteza de roble. Beber tres veces al día durante una semana.
Alimentos que ayudan a combatir la incontinencia:
1.- Aguacate: rico en vitamina E. Combate la debilidad muscular
2.- Rábano: su poder antiséptico es elevado. Ayuda a atenuar las pérdidas involuntarias si se lo consume con frecuencia. Contribuye a prevenir las infecciones urinarias
Consejos útiles contra la incontinencia
1.- Realizar ejercicios de fortalecimiento de los músculos esfínteres.
2.- Evitar alimentos que afecten el buen funcionamiento de la vejiga como alimentos procesados, chocolate, alimentos azucarados, bebidas con alcohol o refrescos.
3.- Mantener el peso adecuado.
4.- Orinar cada tres horas
5.- Evitar el consumo excesivo de líquido antes de irse a acostar.

Quemaduras



Quemaduras

 Es un tipo de lesión que se produce en la piel, e incluso en tejidos inferiores, causado por diferentes factores como el calor (contacto con llamas, líquidos o superficies calientes, etc.) el frío, químicos (lejías, ácidos) y la electricidad.
Según la intensidad, las quemaduras se pueden clasificar entres formas: primero, segundo y tercer grado. Las quemaduras de primer grado afectan sólo a la capa externa o epidermis enrojeciendo la piel sin llegar a formar ampollas.
Las de segundo grado afectan a las dos primeras capas y forman ampollas las cuales no se deben romper.  Las quemaduras de tercer grado pueden destruir los tejidos y formar zonas muertas como costras.
La primera acción que se debe realizar, frente a una quemadura pequeña (de menos de dos centímetros de diámetro en niños, o de menos de cuatro centímetros en adultos), es lavar ésta con mucha agua fría (entre 15 y 30 minutos o hasta que cese la sensación) y luego  usar compresas frías o colocar la zona en un tazón de agua fría.  Es importante sólo usar agua fría y no hielo, ya que éste restringe el flujo de la sangre.
Si se trata de una quemadura mayor (de más de dos centímetros de diámetro en niños y más grande de cuatro centímetros en adultos o que esté carbonizada y de color blanco o cremoso o que involucre órganos internos), debe recibir de inmediato asistencia médica.
En el caso de las quemaduras pequeñas, existen varios remedios caseros que se pueden emplear:
Remedios populares
 #1: Cortar un pedazo de una hoja fresca de aloe vera o sábila, aplicar directamente su pulpa sobre la zona afectada o, si se prefiere, mediante una gasa.  La sábila tiene una acción analgésica que mejorará la lesión y, además, facilitará su cicatrización.
  #2: Limpiar, pelar y cortar media papa en láminas.  Luego, dejar enfriar en el congelador.  Aplastar con el tenedor hasta formar una pasta que se pondrá sobre la quemadura con la ayuda de una venda.  Cambiar tres veces al día.
  #3: Aplicar una capa generosa de miel sobre la quemadura.  La miel ejerce efecto analgésico y antibacterial.
  #4: Extender aceite de oliva sobre la zona quemada, y luego rociar por encima un poco de sal marina.  Al principio, se sentirá cierto ardor, pero merece la pena, ya que evita la aparición de la molesta ampolla.  Finalmente, proteger con una gasa.
  #5: Aplicar yogur natural sobre las quemaduras pequeñas, ya que favorece su cicatrización y su curación.  
  #6: Elaborar una pasta con aceitunas machacadas en un mortero. Extenderla sobre un trapo limpio y aplicar sobre la zona afectada lo cual aliviará el escozor e impedirá la formación de ampollas.
 #7: Limpiar un par de hojas de lechuga, cortarlas muy fino y agregar unas gotas de aceite de oliva. Aplicar sobre la piel afectada sujetas con una gasa.  Dejar actuar durante dos horas y repetir el proceso en caso necesario.
  #8: Abrir una cápsula de vitamina E y extender su contenido sobre la piel irritada lo cual ayudará a evitar la formación de cicatrices.
  #9: Cortar un Ajo porro en rodajas y colocarlas sobre la zona lesionada con una gasa. Cambiar varias veces al día.
  #10: Tomar un puñado de hojas de melisa, limpiar bien y macharlas con el fin de extraer su jugo.  Extender éste sobre una gasa el cual debe ser colocado en la zona afectada. Repetir tres veces el mismo día.
  #11: Aplicar directamente la clara de un huevo sobre la quemadura y dejar actuar durante media hora. Así se impedirá que la piel se deshidrate.
  #12: Extraer el jugo de un puñado de yerbabuena.  Combinar con un poco de agua fría.  Aplicar, con una gaza esterilizada, sobre el área quemada levemente.
  #13: Aplicar la piel transparente de la cebolla sobre una quemadura pequeña para evitar que se empolle.
  #14: Verter dos puñados de hojas desmenuzadas de malvavisco en medio litro de agua caliente y dejar en reposo durante 8 horas.  Aplicar, a modo de compresas sin escurrir, sobre la zona afectada.
Recomendaciones
Vigilar todas las quemaduras, por muy pequeñas que sean, ya que, al estar la piel lesionada se encuentra expuesta a las bacterias que pueden causar una infección y facilitar la formación de cicatrices. Cualquier quemadura que no sane en un lapso de10 a 15 días, que se caliente o enrojece de nuevo o que tenga una ampolla llena de un líquido verduzco o café, requiere la observación de un doctor.
No reventar las ampollas, ya que es la manera que el cuerpo mantiene estéril la quemadura.   Si se abre una ampolla por accidente, se puede facilitar la infección.  Para evitarlo, se debe limpiar la zona con agua y jabón y aplicar suavemente un poco de ungüento antibiótico y cúbrala después.
Tomar mucha agua y vitaminas, ya que la hidratación es importante para ayudar a mejorar una quemadura. Igualmente, es aconsejable tomar jugos de frutas y verduras.
Y finalmente recuerde que lo más importante para evitar accidentes y quemaduras en la casa es la Prevención, alejando los objetos peligrosos fuera del alcance de los niños, Proteger y colocar la plancha en un resguardo, voltear siempre las asas o mangos de los sartenes y ollas hacia la parte posterior de la cocina, guardar en sitio seguro encendedores y fósforos,  no utilizar en casa líquidos inflamables, si por alguna razón utiliza velas, debe tener presente los riesgos y peligros que esto representa, sobre todo con los niños, etc.

Acné



Acné
El acné es una condición inflamatoria de las glándulas sebáceas.  Por lo general, las lesiones se encuentran ubicadas en la cara, cuello, pecho y en los hombros.
El acné usualmente ocurre en la adolescencia, debido a los cambios hormonales que se producen en ese período. 
Es tanto así que casi seis de diez personas jóvenes entre los doce y veinticuatros años sufren en cierto grado de acné.
Sin embargo, también puede aparecer en las mujeres que ingieren anticonceptivos. Y en la edad madura puede estar relacionado con las funciones intestinales.
En este sentido, les presentamos varios remedios tradicionales, caseros y populares muy utilizados para combatir el acné entre los cuales mencionamos los siguientes:
Remedios populares
 #1: Cortar una zanahoria de regular tamaño y luego se cocina con la menor cantidad de agua posible.  Después se hace puré y se deja enfriar para aplicar sobre las áreas afectadas por alrededor de 20 minutos.
 #2: Aplicar, varias veces al día, la pulpa del aloe vera o zábila sobre los granos de acné.
 #3: Agregar jugo de limón puro, directamente sobre los granos o espinillas.  Esto sólo se recomienda hacerlo de noche, ya que de día el jugo de limón puede manchar el cutis.
 #4: En los casos de personas adultas quienes sufren de estreñimiento  se recomienda combatir este mal, ya que de esta forma desaparecerá luego el acné.  En este sentido, recomiendan tomar un té de salvia tres veces al día como efecto purificador.
  #5: Frotar con ajo crudo varias veces al día sobre el área del rostro donde está ubicado el acné.   El ajo, además, ayuda a despejar la piel de puntos negros.
  #6: Remojar un hisopo de algodón en alcohol y aplicar directamente sobre el grano de acné.  El alcohol tiene una fuerte acción secante lo que ayudará a eliminar el grano, pero se recomienda sólo usarlo una vez al día.
  #7: Remojar durante doce horas una cucharada de raíces de diente de león en 1/4 litro de agua.  Se hierve, se cuela y se toma en ayunas.
  #8: Pelar un pepino y luego rallar o cortar en rebanadas muy finas y remojar en ron.  Aplicar sobre las áreas afectadas por 20 minutos.
  #9: Aplicar una pasta hecha de bicarbonato de sodio mezclado con  vinagre de sidra de manzana diluido, y después enjuagar con agua limpia.
  #10: Aplicar durante 15 minutos todas las noches una mascarilla hecha con leche y harina de avena.
  #11: Lavar la cara antes de dormir y aplicar luego sobre las espinillas un poco de crema dental. Dejar puesto durante la noche y lavar a la mañana siguiente.
  #12: Tomar una taza al día de Infusión de Raíz de Diente de León y Zarzaparrilla.
  #13: Pelar una naranja y dejar la piel macerar toda un día en agua.  En la noche, rayar esta piel y mezclar con 2 cucharadas de yogur natural y 2 cucharadas de harina de avena hasta obtener una pasta homogénea.  Aplicar, a modo de mascarilla, sobre el rostro durante 15 minutos. Realizar esta mascarilla 2 veces por semana.
  #14: Verter en una taza de agua que esté hirviendo 2 cucharadas de hojas de albahaca seca. Tapar, dejar enfriar y colar. Lavar la cara con esta infusión.
  #15: Mezclar en un recipiente 1 cucharada de avena molida, 1 de yogur, el jugo de un limón exprimido y 1 cucharada de miel  hasta que obtener una crema homogénea. Aplicar la mascarilla sobre el cutis con la yema de los dedos, evitando el contorno de ojos y la boca y realizar suaves masajes circulares, insistiendo en la zona de barbilla, nariz y frente. Deja actuar por 15 minutos y aclarar con abundante agua fría.
Recomendaciones
Algunos consejos de salud para aquellas personas que tienen acné:
Tener cuidado con los productos grasosos  Si usted tiene la piel con acné evite los humectantes espesos y los limpiadores que tiene como base el aceite. 
No exfoliarse. Las personas con acné no deben exfoliarse porque irritarían aún más la piel de la cara.
Tener una dieta de frutas y verduras  Se debe evitar alimentos grasosos y chocolates y, en su lugar, se debe cambiar a una dieta donde se incluya alimentos crudos, especialmente fruta y verduras frescas, semillas brotadas  y cereales integrales.
Realizar saunas faciales con agua caliente donde se hayan hervido algunas hojas de llantén.

Ciatica



La ciática

El nervio ciático es el más largo del cuerpo que se extiende desde las vértebras lumbares (parte baja de la espalda) pasa por la cara posterior del muslo y de las piernas hasta el talón del pie.
El dolor que viaja por esta ruta se conoce como ciática.
Ésta se presenta cuando existe presión sobre el nervio causado por lesiones de las vértebras lumbares, inflamaciones del nervio (neuritis) o contracturas de los músculos cercanos al nervio ciático.
El dolor puede manifestarse de diferente forma:
Ligero hormigueo en los pies
Sensación generalizada de punzadas y entumecimiento.
Calambre, espasmo o ardor de la cadera a la rodilla
Dolor como descarga eléctrica en las piernas que puede cambiar rápidamente de localización
Dolor severo que no permite caminar bien
Las personas que tienen mayores riesgos de sufrir de ciática son:
Los que padecen de osteoporosis o artritis
Los fumadores
Aquellos que siempre están levantando objetos pesados
Remedios populares
 #1: Cocer 4 patatas y machar hasta conseguir un puré.  Extender el puré sobre un paño amplio y limpio, a modo de emplasto y colocar sobre la región lumbar. Fijar con la ayuda de una camiseta. Mantener así hasta que pierda el calor.  Repetir un par de veces al día.
 #2: Cortar una cebolla por la mitad y con la parte interna de una de las mitades masajear, mediante suaves círculos, la zona afectada por 10 minutos. Repetir la operación, en caso de ser necesario, a la hora y media o dos horas.
 #3: Aplicar bien calientes varias hojas de Repollo sobre la zona afectada.  Dejar puesto hasta que pierda el calor.
 #4: Masajear la zona con una mezcla de jengibre molido y aceite de ajonjolí.
 #5: Masajear en el área, mediante suaves movimientos circulares, con aceite de semilla de linaza.
 #6: Tomar una infusión de valeriana o pasionaria (pasiflora)  para fomentar la relajación muscular si la ciática es causada por contracciones musculares que presionan al nervio.
 #7: Cortar finamente 50 g. de raíz de rábano fresco, lavada pero sin pelar, y añadirla a un litro de vino blanco. Tapar, dejar reposar tres semanas, filtrar y tomar un vaso 2 veces al día, antes de las comidas.
 #8: Verter una taza de agua hirviendo sobre dos pizcas de mejorana, dos de anís, dos de menta y dos de romero.  Dejar reposar la preparación durante cinco minutos.  Tomar una taza antes de dormir.
 #9: Hervir, durante 15 minutos, en medio litro de agua una pequeña corteza de sauce.  Colar para eliminar posibles sedimentos y tomar una taza cada ocho horas. Su contenido en salicina ayudará a calmar el dolor.

 #11: Colocar una cucharada de tomillo, orégano y ortiga verde por cada litro de agua.  Dejar hervir durante 15 minutos.  Después apagar el fuego, dejar reposar otros 5 minutos y colar la preparación.  Tomar dos veces al día.
#14: Mezclar 1 de cucharadita de polvos de alcanfor, 1 de mostaza en polvo en tres partes de trementina pura, de aceite de girasol y de alcohol para masaje. Aplicar en la zona adolorida.
Recomendaciones
Nunca doblar la columna para recoger algún objeto del suelo; es necesario flexionar las rodillas, ya que cuando doblamos la columna, la presión que se ejerce sobre las vértebras es 10 veces su peso.
Dormir sobre un colchón adecuado para la columna vertebral, ni muy blando ni muy duro.
No utilizar ropa muy ceñida o apretada
Sentarse con la espalda recta.
Evitar la práctica de ejercicios bruscos o ciertas posiciones y movimientos;
No permanecer sentado en una silla muy dura durante un tiempo muy prolongado
Evitar las caídas o los movimientos bruscos.
Acudir a un doctor para que él pueda diagnosticar si se trata efectivamente de ciática o, por el contrario, una claudicación intermitente causada por un flujo sanguíneo arterial deficiente, ya que ésta última presenta un dolor en la parte inferior de la espalda muy parecida a la ciática.