lunes, 25 de febrero de 2013

FIBROSIS UTERINA

Tratamiento natural para la fibrosis uterina


Las fibrosis uterina son especies de tumores benignos que pueden desarrollarse en el interior del útero. Sus síntomas suelen variar, así como los grados de gravedad que van desde muy leves hasta muy dolorosos. En ocasiones las mujeres ignoran su existencia y esta sólo es detectada tras exámenes pélvicos. Una vez que se descubren, los remedios caseros pasan a ser muy útiles a la hora de aliviar dichos malestares.

Síntomas

Los síntomas más frecuentes son:

• Períodos menstruales muy abundantes que pueden causar anemia.

• Micciones muy frecuentes.

• Molestias durante la relación sexual.

• Inflamación del bajo vientre.

• Complicaciones durante el embarazo o el parto.

Causas

Las causas de la fibrosis son múltiples, las más comunes resultan los desequilibrios hormonales y los factores genéticos. Después de la menopausia, se incrementan los riesgos de que la mujer desarrolle fibromas. Las edades entre 30 y 45 años son también propicias. La obesidad y los hábitos alimenticios insanos influyen también en la aparición de dicho trastorno.

Remedios caseros

• Uno de los remedios mejores para deshacerse de los fibromas es aumentar la cantidad de ejercicios que se realice.

• La alimentación es un elemento básico para tratar este problema: aumenta considerablemente la ingesta de vegetales verdes y disminuye la de carnes rojas.

• Otro método natural es aplicar aceite de castor tibio en la zona del abdomen.

• Se dice que algunas hierbas como el cardo o la raíz de diente de león son muy eficaces para combatir los dolores.

• Muy importante como prevención: evitar todo tipo de adicción dañina, como el cigarro, las bebidas y el exceso de peso corporal.

Si bien los riesgos de padecer esta enfermedad por las mujeres no pueden eliminarse, siguiendo estas recomendaciones se pueden reducir considerablemente o promover la curación en caso de ya padecer la enfermedad.

Remedio casero:

1 Taza de Miel pura de abejas.

1 Taza de Licor Blanco.

1 Taza de Jugo puro de Limón.

1 Taza de Pulpa de Sábila.

Licuar bien todos los ingredientes y refrigerar en un frasco de vidrio con tapa.

Tomar una copita al levantarse todos los días