LA
BURSITIS
Las articulaciones del
cuerpo se encuentran rodeadas de bolsas o sacos pequeños (bursa) llenos de
fluido con el fin de proteger los músculos, los ligamentos, los tendones, o la
piel que se fricciona con el hueso… Sin embargo, en ocasiones, debido una
lesión (trauma), el exceso uso de la articulación (movimiento repetitivo), una
infección, la artritis o la irritación de los depósitos de calcio en las
paredes de las bolsas, éstas se inflaman y es entonces que se presenta la
bursitis.
Es importante observar
que afecta principalmente los hombros, los codos, las caderas y las rodillas,
aunque también los juanetes son considerados como bursitis.
#1 Mezclar dos cucharaditas de vinagre de
sidra de manzana y 1 de miel pura en un vaso de agua y consumirlo con cada comida.
Esta preparación ayuda a disolver el calcio cuando su acumulación ha sido la
causa de la bursitis.
#2 Comer un aguacate al día hasta que el dolor
ceda. El aguacate es rico en vitamina E que se considera un agente
antiinflamatorio eficaz durante la fase dolorosa y, además, su consumo podría
ayudar a prevenir la formación de depósitos de calcio en la articulación
afectada.
#3 Consumir una tajada de piña principalmente
en el desayuno. Esta fruta contiene bromelain enzima que es un buen agente
antiinflamatorio.
#4 Colocar 1 puñado de uvas en una licuadora,
sin semillas, con 2 manzanas peladas, partidas y sin semillas y 1 limón, con la
cantidad de agua necesaria. Licuar y tomar este jugo dos veces al día hasta que
la inflamación se reduzca.
#5 Licuar un manojo de
berros junto con un vaso de agua. Luego, lavar, pelar y cortar 4 zanahorias y
agregarlas en la licuadora. Licuar y tomar un vaso de este jugo dos veces al
día hasta que la inflamación ceda. La zanahoria es rica en betacaroteno que se
requiere para la curación de las heridas y para las inflamaciones de los
tejidos como las bursas.
#6 Aplicar una compresa de hielo durante 10
minutos y quitarla durante otros 10 minutos si la articulación se siente
caliente al tocarla con el fin de aliviar el dolor.
Después de que se ha
bajado la hinchazón inicial,.
#7 Usar una rodillera
o muñequera, según donde tenga la zona afectada.
#8 Verter un puñado de
linaza machacada en un recipiente que contenga dos cucharadas de aceite de
oliva. Batir hasta lograr una pasta. Si queda muy ligera, puede añadir más
linaza. Calentar por unos minutos la preparación y luego colocar ésta sobre una
gasa y aplicar en la zona afectada la cual debe estar previamente untada por un
poco de aceite de oliva.
#9 Cocer varias hojas de col y luego ponerlas
aplastadas, aún calientes, entre 2 gasas. Aplicar tibia sobre el área afectada.
#10 Realizar un
compuesto con 5 gotas aceite esencial de romero, mejorana y pino con una
cucharada de aceite de almendra y aplicar suavemente sobre la articulación,
varias veces al día.
Recomendaciones
naturales
Descansar la zona con
bursitis cuando se encuentra en su fase primera (aguda inflamación) aunque sin
que quede totalmente inmovilizada.
Acudir al doctor, si
el dolor persiste después de algunos días, ya que podría ser necesario un
tratamiento para una infección oculta o para la eliminación quirúrgica de los
depósitos de calcio.
Ejercicio, para
mejorar la bursitis del hombro, consiste en inclinarse hacia adelante mientras
se está de pie y dejar que el brazo oscile hacia atrás y adelante como un
péndulo, aumentando gradualmente el arco.